Un viaje a Mongolia, conocer la materia prima desde su origen, vivir en la capital del arte y el estar constantemente empapados de la industria textil es tan solo el inicio de la historia de los hermanos Leret.
La fascinación por el arte, la moda y el diseño son algunas de la características que se pueden apreciar en la narrativa de la marca de suéteres de cashmere. Fundada recientemente por Andrea y Edouard Leret, el origen de esta marca de lujo Made In Mongolia, fundada en Nueva York y con raíces Venezolanas es crear un prenda básica, atemporal y unisex que se pueda usar los 365 días del año y sea eterna.
Cada uno de los suéteres es edición limitada y cuenta con una gama de color meticulosamente seleccionada, la cual se puede repetir en distintas piezas con la finalidad de evitar explotar la materia prima, cada colección contará con una edición especial fabricada con los tonos naturales de la misma lana.
El proceso de extracción del pelo de la cabra en Mongolia es realizado por los nómadas a través de un masajeo, con ayuda del cambio de clima extremo del gélido invierno a la llegada de la primavera, permite que el pelaje caiga por si solo.
La colección está formada por doce piezas, pero no necesariamente será su formula de creación, puesto que cada uno de los suéteres tiene su propia historia y habrán veces que haya 15, 10 u 8 historias que contar.
Los gráficos de cada uno de lo suéteres es único, desde un divertido avión de papel, a unas clásicas líneas horizontales monocromáticas, hasta una hoja de cannabis que alude a un atardecer en la Costa de California.
El corte relajado es ideal para todo tipo de cuerpo, además invita a que la pieza sea timeless, es por ello que no creen en una paleta de color destinada a primavera, verano, otoño o invierno simplemente los colores son seleccionados en base a la historia detrás de cada suéter y cada colección.
Los fundadores creen fielmente que la identidad de la marca debe tener el mismo peso que el producto, y se puede apreciar desde el logo, hasta el packaging que está integrado por un tote bag de algodón crudo, un sobre del mismo material que protege el suéter, un cepillo especial para mantenerlo en su estado original y finalmente un par de postales que cuentan un poco de la historia de la marca, cabe decir que hay mucho que contar.
Su proyección a futuro es crear un colectivo de gente que inspira, no tan solo una marca de moda e invitar a distintos artistas a colaborar para intervenir en cada colección una pieza.
Esta primer colección es impecable, la calidad del material y la atención a cada uno detalles se distingue a leguas.
Es inevitable no identificarse con una marca que busca comunicar los mismo ideales que tu sobre la industria y encima ver el talento de dos jóvenes latinos en un sector que carece de diversidad.
Las colección estará disponible hasta el 6 de Diciembre dentro de The Feathered en Emilio Castelar 22, Polanco, CDMX.