Uno de los factores más importantes para cambiar nuestros hábitos de consumo, es el cuidado que le damos a nuestra ropa, ya que gracias a ello puede durar el mayor tiempo posible sin necesidad de deshacernos de ella antes de lo previsto a causa del desgaste.
Mis frustraciones hacia el cambio climático crecen día a día, por fortuna cada vez que me meto a cualquier red social veo más preocupación de la gente que me rodea, este tema no es sólo una tendencia, es un preocupación real.
Me encuentro en mi estudio escribiendo esto mientras huele a humo, un olor al que lamentablemente los ciudadanos de la capital nos estamos acostumbrando debido a la cantidad de incendios que hay por las sequías (quiero pensar) y la temperatura, no me atrevo a ver los grados pero el hecho de usar shorts y faldas las ultimas tres semanas, me asusta.
Los Lunes lavo la ropa, sí yo lavo mi ropa, ya que de esta manera puedo controlar las cantidades de detergente y suavizante que se usa, además de encargarme del cuidado que requiere para que dure el mayor tiempo posible. Para mi es la manera más sabia de controlar mi consumo de detergentes y de ropa.
Esto no es una cátedra donde les voy a platicar la excelente consumidora que soy ni mucho menos, pero creo que es una buena forma de compartir mis hábitos de limpieza para ofrecerles alternativas que pueden ayudar a nuestro planeta.
El otro día fui al súper y descubrí que después de 7 meses de haber regresado de Madrid y tomar la decisión ejecutiva de lavar mi ropa (en vez de pagar a alguien) tuve que comprar detergente y suavizante de ropa, un logro casi imposible pero lo hice realidad al yo encargarme de la lavada, definitivamente no es algo que estemos obligados a hacer pero debo decir que quedé en shock, antes solía comprar mucho más, puesto que la señora que me ayudaba abusaba de las cantidades de detergente y a pesar de mi esfuerzo por enseñarle las consecuencias de ello, no lo entendía.
Debo decirles que aun no he encontrado una opción orgánica o eco friendly de detergentes pero si descubrí que es mejor comprar el bote XXL aunque seamos dos personas, ya que contiene más producto y generamos menor consumo de plástico, a diferencias de estar comprando cada mes un bote relativamente pequeño de detergente.
Hay opciones de detergentes a granel en envases de vidrio que espero probar la siguiente vez, lamentablemente la última no lo pude hacer por las prisas y urgencia (todos somos humanos), antes de comprar detergentes bio siempre lean las etiquetas por que no necesariamente los son y a veces el contenido lo puede ser pero el envase es un crimen.
Mi ciclo de lavado favorito por excelencia es delicado con agua fría y ahorro de agua, divido por color pero si no junto la cantidad de ropa del mismo tono me espero a que la tenga para evitar desperdiciar tanta agua, también me he librado del capricho de querer usar a fuerza lo que esta sucio, me espero y uso algo más, es un crimen meter una lavadora para pocas prendas.
Evito a toda costa usar la secadora de ropa, tan solo lo hago para piezas que tarden mucho en secar y una vez que la uso meto la mayor cantidad de prendas posibles, para que se seque todo en una sola carga, incluso si son diferentes telas y colores, solo pongo ciclo delicado para evitar que se echen a perder.
Una de las mejores compras que he hecho este año fue un tendedero de aluminio que no solo es lindo le caben mil cosas.
Finalmente este 2019 me deshice de la plancha tradicional, sólo uso plancha de vapor para las cosas que realmente lo necesitan, no plancho ni sábanas, ni playeras y mucho menos los jeans, dejemos de juzgar el drapeado natural de las prendas.
No espero que estos hábitos sean fáciles de aplicar para todos, sobre todo para familias grandes pero se pueden adaptar y también creo fielmente que la gente que nos ayuda también se preocupa por el medio ambiente y de no ser así se lo podemos transmitir.
Los pequeños cambios son los que nos hacen grandes.